La start-up británica Small Robot Company, famosa por su compromiso con la robótica aplicada a la agricultura, se encuentra en un aprieto financiero significativo. En una reciente declaración, la empresa anunció que su inversor principal ha retirado su financiación, dejándola en una posición precaria para continuar con sus operaciones.
Según Small Robot Company, el inversor principal de capital riesgo se ha retractado de la ronda de financiación planificada de la empresa. La compañía destacó en negrita que «creen en nuestra tecnología y en nuestro equipo, pero consideran que la agricultura es demasiado arriesgada«. Esta decisión ha dejado a la empresa buscando otras fuentes de financiación, entre las que se incluyen el crowdfunding.
Actualmente, Small Robot Company está luchando para conseguir una financiación puente para continuar con su actividad. Después de lanzar una campaña de crowdfunding, la empresa ha recibido promesas de inversión por más de medio millón de libras esterlinas. «Esto es tremendamente alentador«, ha afirmado Sarra Mander, jefa de marketing de Small Robot Company. Pero sin este apoyo, la empresa podría estar bajo administración a finales de mes.
Small Robot Company ve la recaudación de 1,5 millones de libras a través del crowdfunding como la opción más viable en este momento. Según Mander, «la alternativa es que todos los inversores pierdan todo y que la tecnología no beneficie a los agricultores ni al planeta«. Si la start-up falla, esto podría dañar seriamente la confianza de los inversores y otras start-ups agrícolas que aspiran a seguir su ejemplo.
A finales de 2022, Small Robot Company lanzó la versión 4 de su robot agrícola Tom. Este nuevo diseño modular estaba planeado como la base para los robots Dick y Harry, que se esperaba lanzar al mercado en 2024 y 2025 respectivamente. La start-up tenía la esperanza de que esta plataforma modular permitiera escalar a nivel internacional y construir más robots para el sector agrícola.
Por último, cabe destacar que la compañía británica no es la única start-up que enfrenta dificultades en el competitivo mundo de la tecnología aplicada a la agricultura. A medida que los desafíos se intensifican, es crucial que empresas como Small Robot Company encuentren formas innovadoras de continuar su trabajo y demostrar su valía en este campo emergente.
