El sector agrario español sigue en constante diálogo y colaboración con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, frente a los desafíos del sector y la necesaria armonización de estrategias de desarrollo. En este sentido, el ministro Luis Planas ha expresado recientemente su apertura para continuar las conversaciones con las distintas organizaciones agrarias, a pesar de las recientes discrepancias en respuestas al plan de medidas propuesto por el ministerio.
Aún sin el apoyo unánime, el diálogo permanece abierto. Durante una declaración a los medios tras participar en el pleno del Senado, Planas resaltó que la orientación de las propuestas presentadas recientemente por organizaciones como Asaja, COAG y Cooperativas Agro-alimentarias de España se sitúa en estrecha línea con las 43 medidas de su plan de acción. Este plan ya cuenta con el respaldo de UPA y Unión de Uniones.
Luis Planas enfatizó sobre el hecho que, la semana pasada, se estableció la mesa de seguimiento del mencionado plan, y reiteró su intención de seguir trabajando en sus medidas. De esta manera, quiere subrayar que su ministerio no solo tiende la mano sino que mantiene «las puertas abiertas» a todas las organizaciones del sector agrario, independientemente de las posturas actuales.
Ahora bien, es importante tener en cuenta que algunas de las soluciones planteadas por las organizaciones dependen de los ministerios de Transición Ecológica y Trabajo. Incluso, en el plan de Agricultura, Pesca y Alimentación se han introducido novedades para abordar estas problemáticas, como la reducción del IRPF en materia de módulos y la continuidad de la bonificación del gasóleo profesional.
No obstante, Planas se muestra sorprendido con el cambio de postura que han exhibido Asaja y COAG, manifestándose a favor de excluir las entregas de las cooperativas del ámbito de actuación de la ley de la cadena. Incluso explica que, desde su punto de vista, excluir al mundo cooperativo de la aplicación de la directiva europea sería absolutamente ilegal y contrario a la voluntad predominante en el sector.
Pese a estos obstáculos, el ministro afirmó que perseverará en las conversaciones con todas las organizaciones agrarias y las cooperativas, actuando con espíritu constructivo y de futuro. De esta forma, el diálogo con el sector agrario se muestra esencial para afrontar los retos de un sector clave para la economía nacional.