La adopción de una medida temporal de reducción del IVA sobre los alimentos ha tenido un impacto considerable en la economía española. Según los datos del primer trimestre, la iniciativa ha provocado una caída de la recaudación de 442 millones de euros. Este cambio fue implementado en enero de 2023, en respuesta al elevado precio de los alimentos, y está previsto que concluya el 30 de junio, a menos que el Gobierno decida extenderlo.
El impacto de la eliminación de la reducción del IVA
Dependiendo del curso de acción que tome el Gobierno, el final de esta reducción podría resultar en un aumento del 1,4 % en el Índice de Precios al Consumo (IPC) de los alimentos, según indicaciones del sector. Esta eliminación podría tener consecuencias notables en los consumidores y las empresas.
Desde el 1 de enero del 2023, se eliminó el IVA para los alimentos básicos constituidos por pan, leche, frutas, verduras y huevos. Estos productos gravados con un IVA superreducido al 4 %, y otros como los aceites y pastas, donde el 10 % del impuesto se disminuyó al 5 %, fueron parte de las medidas anticrisis iniciadas por el gobierno con el fin de minimizar los efectos de la guerra en Ucrania.
El camino de la medida de reducción del IVA
A pesar de que la medida fue aprobada inicialmente solo para un semestre, se ha prorrogado dos veces, y continuará en vigor hasta el 30 de junio de este año. Los expertos y los representantes del sector, consultados por varias fuentes, concuerdan en que es probable que esta fecha sea la definitiva para la eliminación de la rebaja.
Fuentes del Ministerio de Hacienda han indicado que la decisión de ampliar la vigencia de la medida ha dependido de la evolución de la inflación. Aún faltan algunos datos a analizar antes de que se decida implementar su desaparición definitiva.
El peso de la inflación y el futuro de los alimentos
Después de meses de moderación en la subida de precios, el Instituto Nacional de Estadística (INE) ha informado de que la inflación ha aumentado en abril, principalmente debido al mayor coste del gas y los alimentos. El dato concreto de la subida en abril se revelará el próximo martes. En marzo, este indicador se situó en el 4,3 %, el más bajo desde noviembre de 2021.
Desde el sector de la distribución, se espera que la decisión sobre la prolongación de la rebaja se tome y se comunique con suficiente antelación para planificar las operaciones en los supermercados.
El director general de Aecoc, José María Bonmatí, sugirió que a pesar de que el contexto es complejo e incierto, las medidas tomadas por las empresas y las administraciones han hecho posible que en los últimos meses el aumento de precios haya podido mantenerse controlado. No obstante, advierte que en el escenario de no extender la reducción del IVA, se estaría hablando de pasar de un IPC alimentario de un 3,6 % a un 5 %.
A continuación, cabe plantearse cuál ha sido precisamente el efecto de esta medida. El profesor de EAE Business School Víctor Fermosel ha destacado el carácter de marketing de una medida con un efecto «nimio» en el bolsillo de cualquier ciudadano, aclarando que las subidas de los precios suben como un cohete y luego para bajar tardan bastante más. Indica que la tendencia no parece que vaya a ser a la baja, aunque es probable que se estabilice.
