El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) ha iniciado los trámites de revisión y posibles modificaciones a la Política Agraria Común (PAC). Esta medida se incluye en un marco de consultas públicas que tendrán lugar hasta el próximo 7 de mayo. El objetivo es simplificar las obligaciones relacionadas con las Buenas Condiciones Agrarias y Medioambientales (BCAM), además de flexibilizar la aplicación de controles y penalizaciones en lo que a la condicionalidad de la PAC respecta.
La proyección de reformas conlleva novedades en cuanto a la gestión de la labranza permite nuevos casos excepcionales para su implementación en parcelas de menor tamaño y para ciertos cultivos leñosos ya presentes desde la solicitud única de 2025.
En referencia a la cobertura mínima del suelo, se permitirá el abono en verde y la ejecución de labores poco profundas en los rastrojos de los cultivos herbáceos. Además, se autorizará el uso de cubiertas inertes en los cultivos leñosos en aquellas parcelas con más del 10% de pendiente a partir del 1 de enero de 2024.
Por otro lado, en términos de rotación de cultivos, los agricultores presentarán la posibilidad de realizar solo una diversificación anual en su explotación. Esta medida será tenida en cuenta para la solicitud única de este año, cuyo plazo de presentación se ha extendido hasta el 31 de mayo.
Asimismo, hay que destacar que aquellos beneficiarios de ayudas que posean explotaciones iguales o inferiores a diez hectáreas quedarán exentos de controles y penalizaciones relacionados con la condicionalidad reforzada a partir de la campaña de 2024, tal y como informa el MAPA.
El Ministerio ha comunicado que estas iniciativas se encuentran entre las 43 medidas comprometidas por el Gobierno en respuesta a las inquietudes expresadas por la comunidad agrícola y ganadera. De esta manera, se pretende dar una solución más adecuada y contextualizada a las necesidades del sector, siempre bajo las premisas de un desarrollo sostenible y en armonía con el ambiente.