El pasado martes, el Gobierno aprobó un paquete de medidas urgentes que responde a las devastadoras consecuencias de la dana, destinada a ayudar a los afectados en sectores clave como la agricultura y la pesca. Este esfuerzo se traducirá en una notable inversión de 10.600 millones de euros que beneficiará a particulares, empresas e instituciones en 78 municipios de la Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha y Andalucía. Con esta declaración, se busca atenuar el impacto económico que ha dejado la tempestad.
Medidas fiscales especiales para el sector agrícola
En este contexto, uno de los aspectos más destacados del real decreto es la inclusión de reducciones fiscales especiales para las actividades agrarias afectadas. Según el Ministerio de Hacienda, se pueden autorizar reducciones en los índices de rendimiento neto, que son los que estiman el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas y el régimen especial simplificado del Impuesto Sobre el Valor Añadido. Esto permitirá que aquellos que han sufrido pérdidas puedan ver aliviadas sus cargas fiscales.
Además, el sector agrícola y ganadero podrá beneficiarse de otras importantes medidas, como la exención de las cuotas del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) correspondiente al ejercicio 2024. Esta exención incluye tanto los bienes inmuebles urbanos como los rústicos y otros de características especiales que hayan sido dañados. De esta manera, el Gobierno busca facilitar la recuperación de las explotaciones afectadas.
Condiciones para acceder a los beneficios
Para acceder a estos beneficios fiscales, se deberá acreditar que las pérdidas en las producciones agrícolas y ganaderas constituyen siniestros que no pueden ser cubiertos por ninguna fórmula de aseguramiento público o privado. Esta certificación será crucial para que los afectados puedan recibir el apoyo gubernamental que necesitan.
Asimismo, las explotaciones agrarias, pesqueras, marinas o forestales que se hayan visto afectadas también podrán beneficiarse de la suspensión de las obligaciones de pago de intereses y principal de los préstamos y créditos sin garantía hipotecaria que han solicitado. Es importante señalar que estas medidas están dirigidas no solo a personas físicas, sino también a aquellos que trabajan por cuenta propia y a las personas jurídicas con un volumen de facturación inferior a 6 millones de euros en el último ejercicio cerrado.
Otras ayudas y beneficios
Este paquete de medidas también incluye una reducción en el Impuesto sobre Actividades Económicas para el ejercicio 2024, que podrá ser solicitada por todas las industrias afectadas por la dana. De esta manera, se busca no solo recuperar las actividades agrarias, sino también proteger los numerosos empleos que dependen de este sector.
Además de directrices fiscales, el apoyo del Gobierno abarcará< strong> ayudas directas, exenciones y aplazamientos de impuestos, así como moratorias en hipotecas. También se ofrecerán avales para los préstamos que se destinen a la recuperación de actividades agroalimentarias, incluyendo comercios de alimentos, restauración y hostelería.
Reflexiones sobre el impacto de la dana
En medio de esta tempestad, la respuesta del Gobierno se presenta como una oportunidad para revitalizar el sector. Con cada medida destinada a mitigar los estragos causados por la dana, se abre la puerta a la esperanza y a la posibilidad de una recuperación. Sin embargo, será fundamental analizar con detenimiento la implementación de estas ayudas y observar cómo realmente impactan las economías locales afectadas por esta catástrofe natural. La fuerza del sector agrícola y la resiliencia de los agricultores serán, sin duda, esenciales en los próximos meses.








