El epicentro de la protesta agrícola en Francia, el emblemático Arco del Triunfo y su confluencia de doce avenidas majestuosas, fue asaltado simbólicamente este viernes por el sindicato de agricultores Coordinación Rural. Aprovechando la sorpresa de la manifestación, al menos 66 de los participantes fueron detenidos tras bloquear el entorno de este singular punto neuralgico parisino con tractores y paja.
La Coordinación Rural había lanzado un claro llamado a tomar el Arco del Triunfo, reuniéndose desde primeras horas de la madrugada en la plaza de Charles de Gaulle -también conocida como plaza de la Estrella- con un contingente de aproximadamente 150 manifestantes. Su consigna era clara: reclamar acciones rápidas para salvar a su 45% de explotaciones en apuros financieros, como declararon en sus canales de comunicación oficiales.
Esta movilización se suma al historial de protestas de este sindicato, frecuentemente asociado con sectores de derechas. El escenario fue especialmente cargado dado que solo unos días antes, el presidente francés Emmanuel Macron se encontraba en París para la apertura del Salón Internacional de Agricultura. En dicha visita, Macron fue recibido con abucheos e incidentes violentos entre la policía y los agricultores, señalando con contundente descontento colectivo al presidente como uno de los responsables de su situación financiera actual.
No obstante, este tipo de protestas no son exclusivas de Francia. De hecho, en los últimos meses, el sector agrícola ha llevado a cabo protestas en numerosos países europeos señalando la falta de medidas efectivas para mejorar su situación económica. A pesar de las acusaciones y críticas, el colectivo agrícola mantiene su convicción de que sus demandas son más necesarias que nunca ante la desatención y el desinterés de los poderes públicos.