La acuicultura se ha erigido como una solución innovadora y sostenible para garantizar un suministro de pescado estable durante todo el año, liberando a millones de consumidores de la tradicional limitación de la «temporada de pesca». Al igual que el salmón y la dorada, una multitud de especies son ahora accesibles a los marisqueros durante todo el año gracias a esta práctica pionera.
En una reciente serie de vídeos producida por la Asociación de Empresarios Mayoristas de Pescado de Madrid (Aempm), Juan Lamadrid de Casa Somorrostro describe la acuicultura como la «producción controlada de pescado». El sector se divide en acuicultura en aguas marinas con bateas flotantes, cultivo en zonas marítimo-terrestres y cría de peces en estanques en tierra; todos ellos contribuyen a que el pescado sea ahora un producto «sin temporada».
La gama de especies admisibles para la acuicultura en España es amplia, contando con más de 40 variedades entre peces, moluscos, crustáceos y algas. Ya sea contextos de criaderos, donde los alevines de diversas especies son criados hasta obtener un tamaño apto para el comercio, o granjas de engorde, la acuicultura en el país abarca desde mejillones y rodaballos hasta peces más comunes como la dorada y la lubina.
Para garantizar un suministro constante en todo momento, las empresas de acuicultura han desarrollado «ciclos» que les permiten planificar adecuadamente el volumen y espacio de producción. Este riguroso proceso de crianza puede incluso incluir hasta siete tallas diferentes de pescado, garantizando así productos siempre a punto para el mercado.
Resulta interesante que el pescado de acuicultura pase por un proceso de ayuno de uno a tres días dependiendo de su tamaño. Este proceso, además de ser beneficioso para la salud del pescado, asegura que el producto final llegue «limpio» al consumidor final, consolidando así la calidad de la acuicultura.
España se ha establecido como un referente en esta industria. Con alrededor de 5.700 establecimientos dedicados a la acuicultura y un total de 272.985 toneladas de producción en 2022, el país es el principal productor de acuicultura de la Unión Europea, con un valor de venta de 809,3 millones de euros y más de 12.500 trabajadores.
No queda duda de que la acuicultura ha redefinido el acceso al marisco en el mundo actual, incrementando su accesibilidad y diversidad. Es hora de dar la bienvenida al nuevo concepto de pescado «sin temporada».