La última semana ha sido de gran agitación en el sector agroalimentario de España y Europa. Los focos de interés han girado en torno a reuniones ministeriales, acuerdos internacionales, tendencias comerciales y clasificaciones de reconocimiento.
La semana arrancó con una reunión vital en Luxemburgo de los ministros de Agricultura, Pesca y Alimentación. Unían fuerzas en la discusión sobre el futuro de la Política Agrícola Común (PAC) más allá de 2027. Todos los países, a excepción de Rumanía, se han mostrado favorables a la proposición. La línea común de pensamiento señala la importancia de que no se reduzca el apoyo a los agricultores, en aras de proteger la seguridad alimentaria de la Unión Europea. Luis Planas, ministro español, exigió a la Unión Europea que flexibilizase y simplificase aún más la aplicación de esta política.
También se puso de manifiesto el anhelo de un acuerdo «pronto y equilibrado» entre la Unión Europea y Mercosur y la relación comercial con China.
En otro orden de asuntos, en una cumbre bilateral en Faro, España y Portugal firmaron un acuerdo para regular el régimen de caudales de los ríos Tajo y Guadiana. Esta es una estrategia enmarcada en el convenio de Albufeira, que garantiza una administración sostenible de los recursos de agua compartidos, en un escenario de crisis climática. Este pacto se orienta a la protección de las aguas fluviales y sus beneficios para los agricultores.
Además, se aprobó un segundo acuerdo entre ambos países para regular la pesca en el tramo internacional del río Guadiana, en busca de igualar las condiciones para las flotas de ambos lados del río.
En lo que respecta a la vendimia, se finalizó con una reducción del 7% respecto a las previsiones de cosecha. Sin embargo, esto ha sido aplaudido como un resultado de una campaña «normal». Además, se hizo una solicitud al gobierno para que se compense el coste del arranque de viñedos.
La venta de aceite de oliva presentó una caída del 17% durante la última campaña, mientras que el aceite de girasol tuvo un incremento de más de un 30%. Aún así, el sector ha empezado a observar señales de recuperación en las ventas de aceite de oliva.
En la línea de los reconocimientos, Sips de Barcelona obtuvo el título de mejor bar de Europa, en el ranking mundial de The 50 Best Bars. En la lista general, quedó en tercera posición, por detrás del mexicano Hanshake Speakeasy y del Bar Leone de Hong Kong. En una gala celebrada en Madrid Arena, la clasificación refuerza la innovación en el ámbito de la coctelería.