La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, liderada por Julián Martínez Lizán, se propone potenciar el sector primario de la región con un enfoque renovado y sostenible para 2024. Entre sus principales objetivos, se encuentra la implementación de estrategias innovadoras que buscan revitalizar la agricultura y la ganadería, teniendo en cuenta la importancia de la Política Agraria Común (PAC) y el impulso al relevo generacional.
El consejero Martínez Lizán recalca la necesidad de facilitar herramientas eficaces para el relevo generacional, enfatizando la mejora y modernización de las explotaciones agrícolas y ganaderas. Esta renovación busca no solo mejorar la calidad de vida de los agricultores y ganaderos actuales, sino también atraer a las nuevas generaciones al sector.
La PAC juega un papel crucial en esta estrategia, con una asignación de 834 millones de euros, la mayor parte del presupuesto de la Consejería. Este fondo se destinará a mejorar la competitividad económica de la región, demostrando un notable incremento en comparación con periodos anteriores.
Otra área de atención es la viticultura. Con una inversión de 63,2 millones de euros, se busca reestructurar aproximadamente 7.000 hectáreas, beneficiando a más de 2.100 viticultores. Este esfuerzo se orienta a optimizar las explotaciones vinícolas, enfocándose en la adaptación a las demandas del mercado y las variaciones climáticas.
La sanidad animal también recibe un impulso significativo, con una inversión de 37,9 millones de euros, un 13,4% más que el año anterior. Este aumento refleja el compromiso de la Consejería con el bienestar animal y la prevención de enfermedades, esencial para el futuro sostenible de la ganadería en la región.
El consejero Martínez Lizán y su equipo se comprometen a fortalecer el sector agroindustrial de Castilla-La Mancha mediante políticas innovadoras y sostenibles, marcando un camino prometedor para el desarrollo rural y la economía de la región. Con estos esfuerzos, se espera no solo mejorar la calidad de vida en las zonas rurales, sino también potenciar la contribución del sector primario al PIB regional.
