La Confederación Española de Pesca (CEPESCA), mayor representante de los armadores en España, ha anunciado su intención de llevar a cabo una serie de reuniones con los partidos políticos que concurran a las próximas elecciones europeas. El objetivo de estas reuniones es pedirles que consideren una revisión de la Política Pesquera Común (PPC) europea y advertirles acerca del riesgo de extinción de la flota pesquera.
Según un comunicado de Cepesca, la Unión Europea (UE) tiene ante sí la elección de mantener una flota propia para garantizar el suministro de pescado a sus ciudadanos o dejar esta tarea en manos de otras potencias pesqueras. La entidad señala también que la industria pesquera española se siente «acorralada» por las decisiones tomadas por los políticos de la UE en los últimos cinco años.
El sector pesquero es una parte vital de la economía española, siendo el líder en el bloque comunitario tanto en volumen como en facturación. De hecho, en el año 2023, España generó el 20% de la producción pesquera total de la UE, con una facturación que ascendió a 1.790,29 millones de euros en primera venta y un valor agregado que supera los 10.000 millones de euros.
Además, Cepesca menciona que las actuales políticas son inviables, citando la obligación de desembarque como un ejemplo. Piden que se simplifique la normativa y se reduzca la burocracia «innecesaria». También solicitan que la UE dé mayor importancia a la «dimensión externa» de su política pesquera con el fin de mejorar la gobernanza internacional.
Desde la patronal pesquera, destacan la necesidad de más control sobre las importaciones mediante la implementación de «cláusulas espejo», evitar la competencia desleal de flotas asiáticas que luego exportan al mercado comunitario sin cumplir con los estándares medioambientales, sanitarios y sociales de la UE. Por este motivo, Cepesca propone la creación de una euro-etiqueta para los productos pesqueros.
Finalmente, Cepesca pide un cambio en la mentalidad de las autoridades europeas, instándolas a «volver a confiar en los datos científicos frente a la brujería medioambiental extrema». El gremio de armadores sugiere que se revisen las vedas a la pesca de fondo en las 87 zonas del Atlántico oriental de la UE, siguiendo las recomendaciones científicas. Asimismo, reclaman un abordaje racional al proceso de descarbonización de la flota y la facilitación del relevo generacional.