Según el último estudio de la Asociación de Fabricantes y Distribuidores Aecoc, un 55% de los españoles prefieren comprar productos que promuevan una alimentación saludable. Este informe, titulado «Nuevas tendencias en una alimentación saludable», evidencia un cambio interesante en el comportamiento del consumidor español.
El precio ya no es el único factor determinante en la adquisición de productos de alimentación y bebidas. Aunque un 66% de los consumidores sigue considerándolo importante, un 34% asegura que la calidad de los productos es más relevante que su coste.
Se ha detectado una orientación hacia la salud en la población española, con un 66% de la misma manteniendo conductas para garantizar una dieta balanceada. De igual manera, el 72% de los entrevistados en el estudio están comprometidos en fomentar buenos hábitos alimenticios dentro de su familia.
Los beneficios de estas acciones, según los participantes de la encuesta, abarcan desde la prevención de enfermedades y el fortalecimiento del sistema inmunológico hasta la mejora de la condición física y el estado mental. Sin embargo, no todas las personas se encuentran en este camino. Un 34% admite que hace poco o nada para promover una alimentación saludable.
Las causas para este comportamiento varían. Un 50% apunta a la falta de costumbres alimenticias saludables, un 41% admite su pereza para cambiar sus hábitos, un 38% considera que mantener una dieta equilibrada es demasiado costoso y un 33% cree que los productos saludables son menos sabrosos.
El interés por la salud no se limita a la compra en supermercados. El estudio de Aecoc indica que, en el consumo fuera de casa, los consumidores también buscan platos con propiedades beneficiosas para la salud. En este sentido, el 52% elige sitios con recetas que aporten este valor extra. Además, optan por opciones ligeras, destacando los ingredientes naturales y aquellos alimentos bajos en grasas y azúcares.
También es notable el hecho de que, en busca de una mejora en su salud, los consumidores optan por productos como infusiones y tés por sus propiedades depurativas (34%), alimentos con un alto contenido en proteínas (29%) y productos enriquecidos con calcio y vitaminas (25%).
Este cambio en las preferencias de los consumidores españoles es reflejo de una tendencia creciente a nivel global hacia la alimentación consciente y saludable. Según el estudio, el reto de ahora en adelante será ofrecer productos de calidad a precios accesibles.