La profesión veterinaria se enfrenta a una semana de intensa movilización en Madrid. Con el objetivo de expresar su disconformidad hacia una normativa vigente que, según los profesionales, podría comprometer la salud de los animales y, por ende, la salud pública, se han organizado varios actos de protesta.
Protestas programadas
La primera gran manifestación tendrá lugar este viernes ante las puertas del recinto ferial Ifema, en coincidencia con la clausura del congreso Iberzoo Propet, especializado en animales de compañía. La plataforma VetsUnidos estará a la cabeza de esta actividad, que se desarrollará bajo el lema "La legislación nos coarta". Esta iniciativa busca unir a los veterinarios en una llamada de atención contra lo que consideran "un sinsentido".
Pero esta no será la única protesta prevista. La próxima semana, el miércoles 5 de marzo, los veterinarios continuarán su lucha, esta vez congregándose frente al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) para expresar sus exigencias y preocupaciones.
Demandas de los veterinarios
Entre las principales reivindicaciones de los veterinarios, destaca la necesidad de cambiar el uso de la herramienta conocida como PresVet, que controla la dispensación de antibióticos. Quieren que se implemente una solución "más eficiente y compatible con la práctica diaria". Esto se debe a que consideran que la actual legislación no solo es ineficaz, sino que en muchos casos entorpece su labor.
Además, exigen poder dispensar tratamientos completos a los pacientes mediante el fraccionamiento de envases clínicos. Esta medida podría reducir costes y mejorar la atención a los animales, permitiendo que los veterinarios adapten los tratamientos a las necesidades específicas de cada paciente. También requieren que se priorice el criterio clínico y la evidencia científica sobre la información contenida en las fichas técnicas de medicamentos, que consideran "desactualizadas".
Por otra parte, los veterinarios piden la eliminación de las sanciones "desproporcionadas" que han enfrentado en diversas ocasiones y buscan una reducción del IVA aplicado a los servicios veterinarios, lo que podría aliviar la carga económica tanto para los profesionales como para los dueños de mascotas.
Protestas anteriores y apoyo institucional
No es la primera vez que el colectivo veterinario se manifiesta en contra de la normativa que regula su profesión. En febrero, VetsUnidos organizó un cierre simbólico de clínicas veterinarias durante varios minutos como una acción de protesta. La convocatoria tuvo el respaldo de agrupaciones como la Federación Estatal de Sindicatos Veterinarios (Fesvet) y la Confederación Empresarial Veterinaria Española (CEVE), quienes se han unido a la causa.
A través de estas movilizaciones, los veterinarios esperan que sus voces sean escuchadas y sus preocupaciones atendidas. La salud de los animales y el bienestar de la sociedad son temas críticos que requieren atención y adaptación a las realidades del ejercicio profesional en el ámbito veterinario.
Ahora, más que nunca, es fundamental que la sociedad conozca estas luchas, ya que implican no solo el futuro de la profesión veterinaria, sino también la salud de los animales que dependen de su cuidado. Con acciones como estas, se abre un espacio de diálogo que podría transformar la normativa hacia un enfoque más eficaz y humano, tanto para veterinarios como para los compañeros de cuatro patas que tanto necesitan de su apoyo.








