Atestiguando una extraordinaria demostración de solidaridad, agricultores de toda España se están movilizándose hasta la frontera con Francia. La razón de este éxodo no es otra que llevar a cabo diversas acciones de protesta y bloqueo, en lo que parece ser una enérgica demanda de mayor apoyo y control sobre las importaciones por parte de las autoridades españolas y de la Unión Europea.
Los agricultores, convocados por plataformas independientes, se están dirigiendo en sus tractores a puntos fronterizos clave a lo largo de Navarra, el País Vasco, Aragón y Cataluña. Esta oleada de movilizaciones ya ha comenzado a generar retenciones y problemas de tráfico en diversas carreteras. En concreto, en la localidad de La Jonquera, en Girona, se han registrado considerables aglomeraciones.
Algunos de los lugares donde se espera que los agricultores interrumpan el tráfico tanto a pie como con tractores incluyen Irún-Biriatou, en el País Vasco, Canfranc y Sallent de Gállego en Aragón, así como Bossóst, La Seu D’Urgell, Puigcerdà, Coll D’Ares y La Jonquera en Cataluña. La protesta tiene lugar en la recta final de la campaña para las elecciones europeas, que en España se celebrarán el próximo 9 de junio.
Los cultivadores exigen una serie de cambios en la política agrícola, incluyendo una disminución de los impuestos y ayuda frente a los crecientes costos de los carburantes. Asimismo, piden un mayor control de los productos importados. Según han declarado, perciben que la Unión Europea debe primar sus productos frente a los que entran de fuera.
Además, los agricultores cuentan con un importante respaldo del otro lado de la frontera. Varios sindicatos agrícolas franceses han expresado su apoyo a las movilizaciones. Sin embargo, no se espera que participen organizaciones profesionales agrarias de nivel estatal como Asaja, COAG y UPA, ni Cooperativas Agro-alimentarias o Unión de Uniones.
Este caso revela la creciente frustración entre los agricultores españoles respecto a la regulación agrícola. Muchos agricultores sienten que se enfrentan a una competencia desleal debido a la falta de control sobre las importaciones, y esperan que su protesta lleve a la implementación de medidas que protejan su derecho a una competencia equitativa.