Con un objetivo de cumplimiento anticipado a la nueva ley comunitaria europea, los exportadores de carne de vacuno argentinos han llevado a cabo una gran inversión para certificar la procedencia de sus productos. Este nuevo reglamento, que será efectivo a partir del 1 de enero de 2025, busca asegurar que los alimentos importados no provienen de zonas donde se haya practicado la deforestación.
El gasto realizado se eleva a más de 3 millones de dólares, según datos del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva). Y es que el mercado europeo supone un impacto económico de entre 465 y 558 millones de euros para Argentina. A esta inversión hay que contemplar, además, el esfuerzo puesto en la formación y en la adaptación de las más de 250.000 explotaciones existentes en el país.
La tarea de garantizar un producto respetuoso con el medioambiente no es fácil. El Ipcva, en un encuentro con periodistas en Bruselas, recalcó la necesidad de que este esfuerzo sea reconocido y valorado tanto en el precio del producto como por los consumidores. De este modo, la certificación no solo beneficiará al mercado europeo, sino que podría tener un efecto positivo en todos los consumidores a nivel mundial.
Esta inversión y esfuerzo no es nueva para Argentina, ya que han emprendido una ruta similar en el sector de la soja. Gracias a esa experiencia, el Ipcva asegura que han sumado aprendizajes valiosos para el proceso de certificación de la carne de vacuno.
Entre los datos destacados, se sabe que este país vendió a la Unión Europea alrededor de 49.000 toneladas de carne de vacuno en 2023. En ese mismo año, las exportaciones totales alcanzaron las 950.000 toneladas, con una recaudación de 2.500 millones de euros y con China, Israel y Alemania como principales destinos.
Actualmente, se enfocan en validar que son «un proveedor confiable» para el consumidor europeo desde hace décadas. Para ellos, cumplir con la reglamentación necesaria para ello es una responsabilidad esencial en esta nueva etapa. Según el Ipcva, una vez transcurrido el primer año de la implementación del certificado, podrán evaluar los resultados en ventas y precios y valorar el impacto real de la certificación.