La campaña de fruta de hueso en España se encamina hacia buenos resultados, con los productores pronosticando que la cosecha nacional de melocotones, nectarinas y paraguayos podría alcanzar 1,5 millones de toneladas, un incremento del 1% en comparación con el año 2023. Sin embargo, aún queda tiempo para que se consoliden los resultados positivos de esta temporada.
Javier Basols, el encargado de fruta de hueso de la organización Cooperativas Agro-Alimentarias, aseguró que la calidad de la fruta hasta ahora ha sido aceptable y que «hay suficiente agua para ir aportando a la tierra». En cuanto a los mercados, Basols reportó que esta temporada de frutas de hueso está marcada por «cotizaciones aceptables».
El avance de la campaña se ha desarrollado positivamente en varios lugares de España, entre los que resaltan Andalucía, Murcia, Extremadura y Valencia. Todos estos son regiones vitales para la producción de frutas de hueso.
En cuanto a las predicciones a nivel europeo, la situación es también esperanzadora. Durante el foro ‘Europech’, los países productores de la Unión Europea estimaron que la producción total de frutas de hueso se situaría en 3,4 millones de toneladas, un aumento del 4% en comparación con 2023. Esta alza se debe, en gran parte, a la ausencia de incidencias meteorológicas significativas.
La tendencia optimista también se refleja en los pronósticos de la producción individual de frutas. Se espera que la nectarina lidere la producción con 590.896 toneladas, seguida del paraguayo con unas estimaciones de 310.873 toneladas, aunque imprime un descenso del 4% respecto al año anterior. Para la pavía se estima un volumen de 307.542 toneladas, lo cual representa un incremento del 6%.
Finalmente, los productores continúan de cerca la evolución de la situación y se mantienen esperanzados de que estos resultados se materializan. Esto supondría un acierto para el sector, que se encuentra bajo la presión de los desafíos del cambio climático y de la inestabilidad de los mercados globales.