El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, Luis Planas, ha señalado la imperiosa necesidad de diversificar y ampliar los mercados agroalimentarios, especialmente en un contexto donde los aranceles de la Administración estadounidense de Donald Trump están afectando de manera significativa a las exportaciones. La próxima visita del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a Asia, que incluye destinos como Vietnam y China, respalda esta estrategia comercial.
Incremento de las exportaciones agroalimentarias
Durante su intervención en el Salón Gourmets en Madrid, Planas destacó que el sector agroalimentario español superó los 74.000 millones de euros en exportaciones el año pasado, lo que se traduce en un superávit de 19.000 millones de euros. Los datos revelan que los mercados fuera de la Unión Europea más relevantes para España son el Reino Unido, con 4.200 millones de euros, Estados Unidos, con 3.600 millones, y China, que aporta 1.900 millones de euros.
“Mantener nuestra presencia en estos y otros mercados es el primer objetivo, y el segundo, si es posible, ampliar nuestra presencia”, declaró el ministro. Este enfoque es especialmente relevante ante la creciente competencia en el sector global.
Visita a Asia: una oportunidad comercial
Planas enfatizó la importancia de la visita que realizará Sánchez a estos países asiáticos, subrayando que se busca “profundizar las relaciones comerciales” y consolidar contactos existentes, especialmente en el ámbito agroalimentario. Esta estrategia se presenta como una alternativa clara a los desafíos impuestos por los aranceles estadounidenses.
No es la primera vez que la relación agroalimentaria entre España y Asia se pone en el centro de la estrategia gubernamental. La reunión en Pekín para el #SpainFoodNation Summit es un claro ejemplo de los esfuerzos realizados para promover productos españoles en mercados clave, en un contexto global que se enfrenta a tensiones geopolíticas.
Unidad y estrategia ante los aranceles
El titular de Agricultura también hizo un llamado a conseguir unidad en la respuesta de la Unión Europea (UE) frente a los aranceles estadounidenses. “Es fundamental tener la cabeza fría al tomar decisiones que no perjudiquen nuestros intereses”, agregó. Esta reflexión es especialmente pertinente para evitar que los aranceles a productos estadounidenses aumenten los costos en el sector agrícola español.
Además, Planas subrayó que sectores como el aceite de oliva y el vino han comenzado a anticipar envíos a Estados Unidos en respuesta a la incertidumbre generada por el conflicto arancelario.
Nuevos mercados y oportunidades
En este mismo contexto, el ministro ha destacado la necesidad de no solo fortalecer su presencia en la UE, que sigue siendo el principal destino de las exportaciones, sino también de abrir nuevas posibilidades en mercados externos. Entre las oportunidades se encuentran los acuerdos con el Mercosur y otros países como Canadá, Corea del Sur y Japón. Las posibilidades de expansión son grandes, y el Gobierno se compromete a apoyar al sector agroalimentario en este proceso.
“Como gran potencia agroalimentaria, España se focalizará en continuar ampliando mercados y llevando nuestros excelentes alimentos y bebidas a más de 150 países donde ya estamos presentes”, enfatizó Planas, incitando a los productores a aprovechar al máximo estas oportunidades.
Planas también ha instado al sector a que realice “una tarea de imaginación comercial y empresarial”, una llamada a la acción que pretende motivar a los operadores ante los desafíos actuales.
La búsqueda de nuevos mercados y el aprovechamiento de acuerdos comerciales son cruciales para la sostenibilidad de la industria agroalimentaria en España. ¿Qué medidas adoptarán los productores para adaptarse al dinámico panorama global? Este es un momento fundamental para reflexionar sobre cómo la innovación y la unidad pueden transformar el futuro del sector agroalimentario español.