El ámbito de la carne de cerdo de capa blanca defiende la necesidad de un consumidor informado a la hora de tomar decisiones sobre la alimentación. Durante el encuentro Diálogos EFE «Nutrición y hábitos de vida saludables», destacados profesionales del sector como Alberto Herranz, director general de la interprofesional del cerdo de capa blanca, subrayaron la importancia de informarse adecuadamente antes de tomar decisiones alimentarias.
Alberto Herranz defendió que «cada decisión sobre alimentación es respetable», pero recalcó que se debe «escuchar a los expertos», ya que ellos son «los que conocen cómo funciona nuestro cuerpo». En esta línea, criticó que muchas decisiones dietéticas actuales se basan en aspectos «emocionales o ideológicos», en lugar de seguir las directrices de los expertos.
Antonio Escribano, director de la Cátedra Nutrición, Salud y Sector Agroalimentario del Centro de Estudios Marañón – Fundación Asaja, también se pronunció a favor de la proteína animal dentro de una dieta equilibrada, destacando su «alto valor biológico» con «todos los aminoácidos necesarios para el hombre y que no puede obtener» de otra fuente.
Por su parte, Gaspar Ros, catedrático de Nutrición y Bromatología de la Universidad de Murcia, coincidió con Escribano al criticar ciertos mensajes «simplistas» que buscan hacer «mágicos algunos alimentos o hacerlos perversos y demoníacos». Ros argumentó que lo importante es «seguir nuestras pautas como omnívoros», es decir, «comer de todo en la cantidad adecuada», y promovió que la proteína se suministre de forma «distribuida a lo largo de todo el día, sin atracones».
El debate concluyó con la defensa del bocadillo de jamón como un elemento clave de la dieta española. Herranz, Escribano y Ros coincidieron al señalar que se trata de un alimento «muy completo» y favorable para el sistema cardiovascular, gracias al perfil de ácidos grasos muy equilibrados de la carne de cerdo blanco y a los carbohidratos del pan.
Este debate pone de manifiesto la necesidad de acudir a fuentes de información fiables a la hora de tomar decisiones sobre la alimentación. Es fundamental que los consumidores tengan acceso a datos contrastados y precisos para poder elegir una dieta saludable y equilibrada.