La innovadora industria del pienso acuicultura en España
La industria del pienso para la acuicultura puede ser considerada como una pieza clave y de vital importancia dentro del ecosistema de la acuicultura española, un sector pujante que genera al año más de 320.000 toneladas de pescado, con valor de primera venta superior a 760 millones de euros. Esta industria es necesaria para alimentar a las variadas especies marinas y continentales como la trucha, la dorada o la lubina. Se estima que el requerimiento anual de pienso es de cerca de 115.000 toneladas según un análisis efectuado por Efeagro.
Pese a que este segmento de la alimentación animal sea un gran desconocido, cumple con un papel relevante que sitúa a España a la vanguardia en Europa, impulsada por la producción anual de más de 174.000 toneladas de pienso para peces y animales marinos, según datos de la patronal de alimentación animal Cesfac. No obstante, cabe destacar que estas cifras solo representan el 1% del total de pienso de ganadería consumido en España, según la Asociación Empresarial de Acuicultura de España (Apromar).
Con respecto a los precios, los piensos para peces son significativamente más caros que el resto de piensos. El alto coste se debe en gran medida a la utilización de la harina de pescado, ingrediente esencial en estos piensos, cuyo precio alcanza los 1.500 euros/tonelada, considerablemente más alto que los cereales ostentan.
En una industria en constante evolución, la acuicultura es pionera en aceptar nuevos ingredientes y formulaciones para sus piensos. Además del trigo, la soja y el maíz, se están incorporando cada vez más subproductos procedentes de la industria cárnica o harina de insectos. El proyecto «Alternfeed», sustentado por fondos públicos, ha sido ejemplo en la investigación y desarrollo de alimentos para peces con base de harina de insectos, junto a compuesto de microalgas e incluso agua de cocción usada en los procesos de fabricación de conservas de atún.
El crecimiento sostenible de la industria acuícola depende en gran medida de la búsqueda de ingredientes alternativos y de la adaptación a los cambios climáticos que afectan la fabricación de harina de pescado. En tal sentido, la innovación juega un papel crucial en la harina de acuicultura en España, una industria de importancia estratégica e indudable potencial para el futuro.