Entrevista a José Luis Urquijo, presidente de la Real Federación Española de Asociaciones de Ganado Selecto (Rfeagas), revela preocupaciones sobre la valoración de la ganadería de razas selectas en España y la importancia de la educación en el consumidor.
El desafío del reconocimiento administrativo
Urquijo ha señalado el «problema de reconocimiento» que enfrenta el sector no solo entre los consumidores, sino también en las administraciones. A pesar de ser visto como un tipo de ganadería «mantenedora de muchos ecosistemas y fijar poblaciones en las zonas rurales», el conocimiento sobre su valor sigue siendo escaso. Para contrarrestar esta situación, la federación está llevando a cabo numerosas acciones que buscan informar al consumidor acerca de la procedencia y calidad de los productos de ganado selecto.
La contribución a la sostenibilidad
La ganadería de razas selectas, que incluye las razas autóctonas, juega un papel crucial en la sostenibilidad del medio ambiente y del medio rural. Urquijo destaca la necesidad de que el consumidor comprenda que al optar por estos productos, está eligiendo alimentos con «historia y valor». Muchas veces, los consumidores no saben que detrás de cada producto existe un esfuerzo significativo por preservar ecosistemas y empleos en áreas rurales.
Desajuste en los precios del mercado
Por otro lado, el presidente ha expresado su preocupación por la formación de precios en el mercado. Según él, el precio «no lo pone el productor», sino que está «distorsionado» por las dinámicas de mercado actuales. Urquijo menciona que los grandes mataderos y las salas de despiece buscan precios bajos para satisfacer a los supermercados, los cuales, a su vez, quieren ofrecer precios reducidos al consumidor final. Esto crea una competencia desigual que desvaloriza la calidad de los productos de razas selectas.
Iniciativas que aportan valor
A pesar de las dificultades, Urquijo valora iniciativas como el logotipo «Raza Autóctona 100 %», que proporciona un impulso significativo al sector. Sin embargo, educar al consumidor sobre la calidad y el valor de estos productos es un proceso «arduo y lento». “Cuando alguien se enfrente a una diferencia de precio, es vital que sepa a qué se debe y para eso hay que educar”, enfatiza Urquijo.
El panorama de exportación
En cuanto al comercio internacional, los productos de ganado selecto en España tienen un potencial limitado fuera del país, a excepción del jamón. La Rfeagas está trabajando para abrir mercados mediante la participación en ferias internacionales y colaboraciones con asociaciones de ganadería selecta en Francia, Italia y Sudamérica. “Por el momento, tenemos un negocio insignificante fuera, aunque reconocemos el crecimiento en el ámbito de la genética”, explica Urquijo.
Fortaleciendo la cooperación internacional
La colaboración con otros países es fundamental para enfrentar los retos comunes que tienen las ganaderías selectas. Esto no solo facilitará el intercambio de conocimientos, sino que también ayudará a fortalecer el valor que dicho ganado aporta, un aspecto que muchos otros países han sabido cuidar mejor que en España. “Es fundamental que aprendamos a valorarnos a nosotros mismos y a dar a conocer lo que tenemos”, sostiene Urquijo.
Representación del sector
La Rfeagas representa a aproximadamente 90,000 ganaderos de raza pura, lo que corresponde al 96% del censo nacional de ganado selecto, equivalente a unos 4,36 millones de animales. Este amplio respaldo resalta la necesidad de unificar esfuerzos para mejorar la visibilidad y el reconocimiento de la ganadería de razas selectas en el territorio español.
A medida que la Rfeagas esboza un futuro lleno de oportunidades, la importancia de educar al consumidor y valorizar adecuadamente los productos de ganado selecto se torna esencial para fortalecer este sector. ¿Estará el mercado español listo para cambiar la percepción sobre la ganadería de razas selectas y su contribución a la sostenibilidad? La reflexión queda abierta.








