La compañía de cerveza Mahou-San Miguel cerró el año 2023 con unos les registros que no habían sido vistos en mucho tiempo, con un beneficio neto de 108,3 millones de euros, lo que representa un incremento del 6,1% respecto al año anterior. Este crecimiento viene apuntalado por un récord de ventas que alcanzó los 1.917,3 millones de euros, lo que implica un aumento del 10% respecto al ejercicio anterior.
La empresa puso en valor que estos resultados se producen en un contexto marcado por la inflación y la volatilidad generada por la particular situación geoestratégica. En este sentido, se destaca el papel activo de la compañía en relación a sus políticas de precios, que han logrado mantener a raya el impacto de los aumentos de costes en su estructura de precios de venta. De hecho, han decidido no repercutir el 100% de dichos incrementos en los precios.
Este relevante aumento en la facturación se debe en gran medida a la estrategia que han llevado a cabo, centrada en la internacionalización de sus productos, generando el 21% de las ventas globales fuera de España. Además, aún con este incremento significativo en las ventas, han conseguido mantener a raya los costes, lo que les ha permitido mejorar sus márgenes de beneficio hasta niveles similares a los obtenidos en el año 2020.
Sin embargo, la empresa no se conforma con estos resultados y tiene planes para seguir creciendo. Entre las acciones que están llevando a cabo, destaca la inversión de 543,6 millones de euros en la modernización de sus centros de producción y un crecimiento del 2,7% en su plantilla, que ya cuenta con 4.179 trabajadores.
Desde la dirección de Mahou-San Miguel se señala que la estrategia de la compañía seguirá centrándose en tres pilares fundamentales: la internacionalización, la innovación y la sostenibilidad. Estos se fundamentan en la capacidad de la compañía para adaptarse a nuevos mercados, siendo capaz de situar sus productos en nuevas geografías y seguir ofreciendo al consumidor productos de alta calidad adaptados a sus necesidades.
Además, en un gesto de liderazgo y apuesta por la calidad, la empresa ha resaltado que seguirán apostando por ser únicamente una marca de fabricante, renunciando a ser una marca de distribución, lo que de momento ha implicado renunciar a un segmento del mercado.
