La gigante de la comercialización de alimentos en España, Mercadona, celebra su quinto aniversario en tierras lusitanas, Portugal, que marcó su primera incursión en mercados fuera de las fronteras españolas. Durante este período, la compañía ha alcanzado un volumen de negocio de 2.770 millones de euros, además de realizar inversiones que superan los mil millones de euros, lo que ha permitido la creación de 50 tiendas y dos complejos logísticos.
El inicio de esta aventura portuguesa para Mercadona ocurrió el 2 de julio de 2019, cuando la compañía estableció su primer supermercado en Vila Nova de Gaia, en el norte de Portugal. Esto marcó el comienzo de una rápida expansión hacia el centro del país y la región de Lisboa, y actualmente cuenta con una plantilla de 6.000 trabajadores en el país.
En su esfuerzo por penetrar en el mercado portugués, Mercadona ha hecho inversiones significativas, incluida la apertura de dos bloques logísticos, uno en Póvoa de Varzim y otro en Almeirim, que se estiman han requerido una inversión de más de 250 millones de euros.
Con la intención de sintonizar con los gustos y preferencias de los consumidores portugueses, en 2017, la empresa inauguró su primer centro de coinnovación en Matosinhos. A lo largo de estos cinco años, Mercadona ha trabajado con proveedores locales, invirtiendo 3.000 millones de euros en compras. Esta colaboración no solo ha permitido a la empresa adaptarse y ofrecer productos que atraigan a los consumidores portugueses, sino que también ha permitido la distribución de productos lusos en España.
La presencia de Mercadona en Portugal no se limita al ámbito comercial y económico, la firma también ha demostrado un fuerte compromiso social con el país, donando 5.500 toneladas de alimentos en estos cinco años.
Inês Santos, directora de Relaciones Institucionales de Mercadona en Portugal, señala que la entrada al competitivo mercado portugués ha supuesto un gran aprendizaje para la compañía y que «estos primeros cinco años han sido un buen inicio y una motivación para seguir construyendo un proyecto de crecimiento compartido y sostenible». Sin embargo, también recalca que «todavía queda mucho por hacer para convertirnos en la empresa portuguesa que queremos ser en Portugal».
