El presidente de las comunidades de regantes, Juan Valero de Palma, ha mostrado su preocupación por la creciente politización y demagogia alrededor del uso del agua en la agricultura española. La demanda total de agua en España se calcula en alrededor de 32.000 hm3 anualmente, siendo la agricultura el principal consumidor con el 80,5% de esta demanda, aproximadamente 25.749 hm3, según datos del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Este volumen de agua se utiliza principalmente para regar los más de 3,7 millones de hectáreas de regadío que existen en España.
No obstante, Valero de Palma sostiene que un gran porcentaje de las críticas recibidas son parte de la demagogia proferida contra el sector de regadío. El presidente de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes de España (Fenacore) ha defendido el progreso técnico del sistema español de regadío y la eficiencia obtenida en la utilización del agua. Según explica, la demanda real de agua del sector agrario ronda los 15.000 hm3 al año, una cifra notablemente inferiror a la reportada oficialmente. Tal discrepancia se debe, en su opinión, a que muchos regadíos están infradotados.
Desde organizaciones agrarias como Asaja y COAG han mostrado su preocupación ante la percepción del regadío como el principal culpable en los problemas de sequía. Por lo contrario, organizaciones como UPA resaltan que los regadíos, gracias a la modernización experimentada, se han vuelto más resilientes frente a los efectos del cambio climático. A este respecto, Valero de Palma señala que el sector ha conseguido reducir el consumo de agua en un 15% en los últimos 25 años. Como ejemplo de esta evolución, destaca que la superficie regada por gravedad ha pasado de ser más del 50% del regadío a solamente un 21% en 2022, mientras que los riegos localizados, mucho más eficientes, ya representan más del 55% del regadío.
A pesar de que Greenpeace ha alertado de que el 75% del territorio español está en riesgo de desertificación, el representante de Asaja mantiene que en España hay suficiente agua para satisfacer todas las demandas. Sin embargo, insiste en que se deben tomar decisiones objetivas y evitar la politización y demagogia en torno al tema del agua. Finalmente, el catedrático de la Universidad Politécnica de Madrid, Alberto Garrido, ha indicado que la clave está en racionalizar el agua disponible para riego y adaptar su uso a las circunstancias de cada año y situación, puesto que existen varias cuencas extremadamente tensionadas.
