El ascenso del vino español como un pilar del turismo en el país ha dado un testimonio convincente de la fascinación del mundo del vino y su papel crucial como fuente de riqueza y empleo. Según el decimosexto Informe Anual de Visitas a Bodegas y Museos del Vino, presentado por la Asociación Española de Ciudades del Vino (Acevin), las visitas a las Rutas del Vino de España registraron un alza del 18% el pasado año, generando un impacto económico superior a los 100 millones de euros únicamente en bodegas y museos.
Acevin ha señalado que casi tres millones de personas, específicamente 2.977.115 visitantes, se vieron atraídas por las bodegas y museos del vino asociados a las Rutas del Vino de España durante 2023. Además, el reporte pone de manifiesto una recuperación completa y una excelente evolución del enoturismo español tras el frenazo provocado por la pandemia del COVID-19.
El informe también desglosa la distribución de las visitas, siendo el 70,5% de los visitantes los que corresponden a las bodegas y el 29,5% a los museos, ambos con cifras de aumento respecto al año anterior. La cuantía generada desde estas visitas se ha elevado hasta los 102.208.000 euros, principalmente por el auge de las visitas y el crecimiento del número de rutas admitidas en la marca.
Los destinos más populares han sido La Ruta del Vino de Rioja Alta, con 389.399 visitantes, seguida de cerca por la Ruta del Vino y el Brandy del Marco de Jerez (382.716 visitantes) y la Ruta del Vino Ribera del Duero (368.537 visitantes).
El informe concluye con la constatación de la predominancia del turista nacional en este segmento, que muestra que el 78,8% del total corresponde a visitantes españoles. Sin embargo, la afluencia de visitantes extranjeros ha crecido, favoreciendo preferentemente la temporada de octubre, seguida por agosto, para emprender estos viajes del vino.