El evento Barcelona Wine Week (BWW) se ha convertido en un escaparate de la «la tradición, el progreso, la innovación y la calidad» que caracterizan las elaboraciones vinícolas españolas, según destacó el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas durante la inauguración. Dijo también que este evento, que dura hasta el miércoles, ofrece «una buena muestra no sólo de lo que estamos haciendo, sino de lo que somos capaces de hacer de cara al futuro», gracias a la participación de alrededor de un millar de bodegas de 73 denominaciones de origen.
El ministro valoró la diversidad de bodegas presentes en la feria, que incluye tanto aquellas de gran tamaño y larga tradición como proyectos jóvenes y microbodegas. El BWW ha logrado ser el lugar de referencia para el vino español en tan solo cuatro ediciones, alcanzando una relevancia que satisface sus aspiraciones.
Este tan espectacular evento, que reúne a 952 bodegas, un 15% más que en la edición anterior, también presenta un gran foro de negocios y contactos, esperando recibir a más de 20.000 asistentes y programar más de 11.400 reuniones de negocio entre expositores y compradores. Se espera que un 80% de los expositores cierre un acuerdo, ya sea durante la feria o a posteriori, lo que supone un alto nivel de éxito.
Cabe destacar que un gran porcentaje de los compradores son estratégicos para la exportación de vino español, procedentes de países como Estados Unidos, Alemania, Canadá, Países Bajos, Reino Unido o China. Están presentes bodegas de peso como Protos, Matarromera, Marqués del Atrio, Pago de los Capellanes, entre otros, así como denominaciones de origen notables como la DO Cava, Rioja Ribera del Duero, Rueda, Priorat, entre otras.
El futuro de la viticultura pasa por ser competitiva y sostenible, e incorporar variedades técnicas de cultivo y procesos de producción y comercialización que reduzcan la huella de carbono, según las palabras del ministro. Por último, felicitó a los bodegueros y les animó a mantener la mirada exterior para seguir siendo pioneros en el mundo vitivinícola. Este evento es, sin duda, una prueba más del importante papel del vino español en el panorama internacional.