La noche de San Juan siempre ha sido especial en todo el litoral español, y las sardinas son parte fundamental de este evento. Sin embargo, este año las ventas de sardinas han experimentado un auge en algunas zonas, mientras que en otras se ha mantenido o incluso disminuido. Este fenómeno ha estado influenciado principalmente por factores geográficos y de gestión pesquera.
Se ha evidenciado un incremento desigual de la demanda de sardinas para la noche de San Juan a lo largo del litoral español. Mientras que en Galicia y el Atlántico, con sus cuotas de pesca y número de pescadores reducidos, la demanda ha aumentado, en zonas como Cataluña y Baleares la tendencia es ligeramente contraria. Este hecho se debe en gran medida a las regulaciones sobre las capturas de sardina establecidas por las autoridades competentes.
Por otro lado, el Mediterráneo ha mantenido una oferta estable, ya que las cuotas de pesca para la sardina no se aplican en esta zona. Como resultado, los comerciantes han podido satisfacer la demanda de las zonas costeras sin problemas significativos.
María Luisa Álvarez, directora de la Federación que agrupa a las pescaderías (Fedepesca), ha señalado que, aunque este año la oferta del Atlántico es menor, se espera que la demanda repunte en esta fecha tan señalada. Además, ha destacado que los precios de las sardinas se han mantenido estables en el Mediterráneo a pesar de la creciente demanda.
En contraposición, algunas regiones como Cataluña y Baleares han experimentado una disminución en las ventas de sardinas. Ángel Máñez, presidente del Gremio de Mayoristas del Pescado del mercado central de Barcelona (Mercabarna), ha atribuido este hecho a cambios en las tendencias de consumo y a las restricciones presupuestarias de algunas familias.
Finalmente, la Asociación de Empresarios Mayoristas de Pescados de Madrid (Aempm) ha informado de un descenso en la venta de sardinas en la lonja de Mercamadrid, que reciben pescado de diversas localizaciones como el sur-Mediterráneo, el norte y Portugal.
En resumen, la venta de sardinas para la celebración de San Juan este año ha mostrado una tendencia desigual en diferentes zonas del país. Las regulaciones pesqueras, las tendencias de consumo y los factores geográficos se perfilan como las principales causas de esta variación.