La Comisión Europea propone una revisión de las medidas de pesca
La Comisión Europea (CE) ha propuesto una revisión de las herramientas con las que cuenta la Unión Europea para tratar las prácticas de pesca no sostenibles realizadas por países no integrantes de la Comunidad. Este anuncio busca mejorar la eficacia de los instrumentos existentes, fortalecer la gobernanza y fomentar la sostenibilidad de los océanos.
En términos concretos, la CE pretende actualizar un reglamento de 2012 con la finalidad de definir las circunstancias que permitirían identificar a aquellos países que posibilitan prácticas pesqueras no sostenibles en el abastecimiento de pescado. Esta propuesta supone un paso importante para aumentar la sostenibilidad en la industria pesquera. Los países que sean localizados bajo estas condiciones podrían enfrentarse a sanciones por parte de la UE, que incluirían restricciones de importación.
El mecanismo brillantemente propuesto por la CE busca abordar de forma no discriminatoria la sostenibilidad a largo plazo de las poblaciones de peces. Este enfoque no solo vela por el equilibrio marino, sino que también supone un apoyo crucial para proteger a las comunidades costeras. Atacar la pesca excesiva representa una defensa firme de la biodiversidad y los ecosistemas marinos.
Además, la CE desea fomentar la competencia justa entre operadores comunitarios y no comunitarios, buscando que las prácticas pesqueras sean justas y equitativas para todos los actores implicados. Con los cambios propuestos, se busca fortalecer el reglamento, proporcionando orientaciones más claras para la implementación de medidas restrictivas. Así, se garantizará que los países que no forman parte de la UE estén completamente conscientes de las condiciones específicas bajo las cuales sus prácticas pesqueras podrían ser objeto de sanciones de la Unión Europea.
La propuesta ahora se moverá a la Eurocámara y al Consejo de la UE para su debate. Una vez obtenido el acuerdo de ambas instituciones, la reforma estará preparada para entrar en vigor. Este avance percibe una Unión Europea comprometida con el respeto al medio ambiente, la sostenibilidad y la justicia en la industria pesquera.