La tradicional fiesta catalana de Sant Jordi está marcada este año por un floreciente aumento en la entrega de rosas. Se espera que los catalanes regalen aproximadamente 7 millones de rosas, un incremento notorio del 20% respecto al año pasado y la mayor cifra registrada desde el inicio de la pandemia. Sin embargo, sorprendentemente, solo el 2% de estas flores proceden de productores españoles, principalmente de la Valencia y la comarca del Maresme (Barcelona).
En un giro interesante, la mayor proporción de rosas viene de Colombia, que aporta un 63% del total. Otro 20% proviene de Holanda y un 15% de Ecuador. Este último ha experimentado una reducción en su producción debido a problemas climáticos, lo que ha llevado a un incremento en los precios de las rosas rojas de origen ecuatoriano.
El presidente del Gremio de Mayoristas de Mercabarna-Flor, Miquel Batlle, ha comentado al respecto que «prácticamente no quedan rosas de aquí, la rosa nacional es un hecho anecdótico». Señala que la producción de rosas a nivel nacional ha disminuido debido a los altos costes que implican y a su baja rentabilidad.
Prevé que Sant Jordi, que se celebrará el próximo 23 de abril, será la última vez con producción de rosas española, y que desde ahora, la mayoría de las rosas vendidas en estas celebraciones tendrán un origen internacional.
A pesar de esto, el sector estima un volumen de ventas de 7 millones de rosas este año, cuyos costes podrían empezar en alrededor de 4 euros por rosa. Aún así, este total de ventas queda lejos de las 8.613.000 unidades que se distribuyeron en 2019, antes de la pandemia.
Otro aspecto notable es la predicción de que los rosales Kokedama tendrán un impacto en este Sant Jordi. Esta antigua técnica japonesa, que significa ‘bola de musgo’, consiste en plantar un rosal de rosa roja en una bola de musgo. A pesar de requerir un cuidado meticuloso, se considera una opción sostenible y duradera para regalar rosas. Dada su popularidad creciente, podría ser una opción que más personas opten por explorar en el futuro.