La cadena de supermercados DIA ha iniciado un proceso para la refinanciación de su deuda que vence a finales de 2025, tras la simplificación de su negocio a dos mercados principales, España y Argentina. Esta movida estratégica ocurrió después de la desinversión en Portugal y Brasil, un movimiento considerado «adecuado» por la firma.
Según el CEO Global de DIA, Martín Tolcachir, la compañía ha tenido que enfrentar «tiempos complejos», por lo que ha agradecido el apoyo de los accionistas. Parte de la estrategia de reajuste implica incrementar la generación de caja y rentabilidad, lo que pasará por procesos de desapalancamiento y preparación para la mencionada refinanciación.
La empresa está comprometida con ofrecer una propuesta de valor sustentable para sus clientes, accionistas y franquiciados. Este compromiso ha requerido una serie de cambios incluyendo la venta de sus tiendas de grandes dimensiones e hipermercados a Alcampo en España.
DIA ha tenido que implementar estos ajustes debido a los resultados lastrados en 2023, sobre todo en el mercado brasileño. Sin embargo, Tolcachir ha destacado el crecimiento positivo en España y Argentina durante el mismo año, con un resultado neto positivo y un avance de venta comparable del 10,7% en el mercado español.
Aunque el contexto macroeconómico en Argentina es complejo, DIA logró un resultado positivo por segundo año consecutivo. A nivel de grupo, las pérdidas se redujeron en un 75%, con una disminución de la deuda financiera neta de 120 millones respecto al año anterior, lo que supone una reducción del ratio de apalancamiento a 1,96 veces.
Estas medidas, aunque necesarias, no desvían el foco central de DIA. Según Tolcachir, la compañía seguirá centrada en «sorprender a sus clientes en España y Argentina», con planes para crecer orgánicamente, apoyado en las fortalezas de su propuesta de valor. Las acciones estratégicas que se han llevado a cabo proporcionan la solidez que necesita la compañía para enfrentar los nuevos retos que plantea la coyuntura económica actual.