El último informe del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) trae a primera línea debates gastronómicos nacionales. Así, si alguna vez se ha preguntado sobre las preferencias de los españoles respecto a la tortilla de patatas, este informe arroja luz sobre la controversia: un 71,8 % de los entrevistados se decanta por la tortilla de patatas con cebolla y, en cuanto al punto de cocción, el 52,9 % prefiere la versión «poco hecha».
Pero cuando se trata de identificar el plato más representativo de la cocina española, la tortilla de patatas no lidera la clasificación. Según datos del CIS, la paella es la reina indiscutible, considerándola tal el 39,6 % de los encuestados. La tortilla de patatas, aclamada por el 33,5 %, y el jamón ibérico, preferido por el 15,5 %, siguen a la paella en popularidad.
Lo que sí mostraron los resultados del informe es la pluralidad de gustos gastronómicos en el territorio nacional, con notables preferencias regionales; la elección de plato favorito varía en función de la comunidad autónoma. Por ejemplo, el 80,4 % de los aragoneses eligió el ternasco mientras que en Asturias, el 83,3 % optó por la fabada.
Por otro lado, el estudio del CIS también ha analizado el comportamiento culinario actual. Según los datos, el 46 % de los españoles considera que la tradición de cocinar en casa va perdiendo impulso, cediendo terreno a los platos de comida rápida. La falta de tiempo para cocinar, consecuencia del «estilo de vida acelerado» actual, es señalada por el 69,3 % como la principal razón de este cambio.
Además, un 13,7 % de los encuestados apuntó otra razón: la comida tradicional es más cara y, por lo tanto, está perdiendo seguidores. Sin duda, los datos recogidos reflejan las múltiples caras de nuestra realidad gastronómica, mostrando tanto nuestras preferencias culinarias como los cambios en nuestras costumbres alimenticias, influenciados por la dinámica de vida actual.