Impacto emocional, la otra cara de los ataques de lobos a la ganadería
Hasta ahora, el foco principal respecto a los ataques de lobos a la ganadería ha puesto el énfasis en el impacto económico, sin embargo, un aspecto que ha estado en un segundo plano, es el toll emocional que estos eventos representan para los ganaderos. Tales consecuencias, aunque a menudo silenciadas, son vividas de manera intensa e íntima por los cuidadores del ganado.
César García, ganadero de Cuenca, da testimonio de esta realidad. Al encontrar a sus animales, parte de su rebaño de ovino y caprino, gravemente heridos o muertos a causa de los lobos, la herida no es solo económica, el factor emocional se hace presente. García afirma que este aspecto es a menudo desatendido, pero es una consecuencia real y palpable de este problema.
Este ganadero de Cuenca, que ha acudido a Madrid para alzar la voz frente a este asunto, demanda no solo mejores indemnizaciones o una disminución de la protección al lobo, también busca visibilizar las heridas emocionales que sufren los ganaderos.
Los ataques de lobos no solo conllevan una pérdida económica, también una herida emocional que agrava la situación. En sus propias palabras, «nadie se acuerda de la herida moral que sufro cada vez que voy a la granja y encuentro a mis ovejas en tal estado». La perspectiva de encontrar a sus animales heridos o moribundos cada vez que se acerca a su explotación agrega a su día a día una carga de estrés y ansiedad considerables.
Además de García, esto lo secundan otros ganaderos, como Borja Fernández, un joven asturiano, quien relata cómo encontró recientemente a una de sus terneras con una herida irrecuperable tras un ataque de lobo. Para estos ganaderos, perder un animal es como perder un miembro de su familia, especialmente teniendo en cuenta el cuidado que ponen en criarlos.
En resumen, si bien es cierto que los ataques de lobos llevan consigo un significativo impacto económico, no es menos cierto que las secuelas emocionales que dejan en los ganaderos son una realidad que merece atención y entendimiento.