En un trágico suceso, el reciente incendio en las instalaciones de la empresa avícola del Grupo Rujamar, ubicada en San Lorenzo de la Parrilla (Cuenca), ha causado la muerte de entre 550.000 y 600.000 gallinas. Este número representa una cuarta parte de la totalidad de los animales que posee la empresa.
El siniestro se originó en torno a las 13.00 horas y afectó a tres de las naves de la granja del grupo, que según indica el presidente ejecutivo de Rujamar, Rubén Martínez, son las más modernas de la compañía, construidas en 2017, 2019 y 2020 , con una vida útil estimada en unos treinta años. La rápida propagación de las llamas dejó poco margen de acción para el sistema de seguridad y antiincendios de las instalaciones, que no logró contener el fuego.
Los trabajadores de las tres naves afectadas lograron abandonarlas de forma segura, aunque uno de ellos sufrió heridas leves. El resto de los animales, aparentemente, pereció a causa de la inhalación de humo, en lo que Martínez describe como una forma «muy rápida y muy cruel».
Pese a la gravedad de la situación, Martínez ha querido transmitir un mensaje de tranquilidad a los clientes de Rujamar. A pesar de la perdida de cerca de 600.000 gallinas, la empresa aún cuenta con dos millones de estas, por lo que espera mantener la cadena de suministro, garantizando la provisión de huevos a sus principales clientes .
Aunque al momento se desconocen las causas del incendio, Martínez ha asegurado que la empresa continuará su labor y se centrará en mitigar las consecuencias del accidente. El Grupo Rujamar, fundado en 1984, se ha consolidado como una empresa de referencia en la avicultura ecológica y en particular por sus medidas de bienestar animal. Siguen comprometidos con su misión, aun en medio de la adversidad.
