En una fase de creciente incertidumbre, los precios de los cereales en las lonjas españolas experimentan un ascenso, según informan fuentes de la patronal de comerciantes Accoe. Las condiciones climáticas desfavorables en los países exportadores, especialmente Rusia, y los miedos ante posible desplomes en las cosechas influyen directamente en esta escalada de precios.
España, país con un déficit de grano, refleja semanas de incertidumbre acentuada por las malas noticias climáticas de las naciones productoras de granos. No obstante, el trigo parece tener un efecto arrastre en el resto de cereales, lo que ha aumentado la preocupación en el sector agroalimentario español.
Si desglosamos los datos, las cotizaciones medias durante la última semana cerrada fueron las siguientes: trigo blando a 235,15 euros/tonelada (aumento del 2,8%), maíz a 229,56 euros/tonelada (crecimiento del 1,6%) y cebada a 221,59 euros/tonelada (incremento del 1,92%). Por otro lado, la cebada de malta se ha situado en los 227,75 euros/tonelada (+0,55 %), mientras que el trigo duro ha sufrido una caída del 0,1 % (296,67 euros/tonelada).
Es importante destacar que desde enero de 2024, se han registrado ciertos movimientos en los valores de algunos cereales. Para ser más preciso, los precios del trigo blando han descendido un 2,88 %; los del maíz, un 1,50 %; los del trigo duro, un 19,27 %; los de la cebada, un 4,25 %; y los de la cebada de malta, un 9,35 %.
En conclusión, los factores climáticos y de producción en las grandes potencias agroexportadoras están generando una mezcla de incertidumbre y trepidación que se refleja en los mercados cerealistas de España. Estas dinámicas pueden tener repercusiones importantes en la economía de los agricultores, los operadores del mercado y, al final, en los consumidores. Por lo tanto, se hace necesario un seguimiento estrecho de las cotizaciones de estos productos de gran importancia para la agricultura española.