Las asociaciones de las industrias cárnica y conservera de pescado en España han hecho sonar las alarmas sobre los peligros potenciales de los productos veganos, señalando la posibilidad de confusión por parte de los consumidores. Estas agrupaciones han dirigido su preocupación al Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 y solicitan medidas y trabajo conjunto para garantizar la salud de la población.
Integradas en la iniciativa #CadaCosaPorSuNombre, representan a sectores que emplean a más de 150.000 trabajadores. Han expresado esta alarma en una reunión con el Secretario General de Consumo y Juego, Andrés Barragán. Consideran que la actual tendencia hacia una dieta basada en plantas, también conocida como «plant based», podría desencadenar en malentendidos respecto a los productos que imitan a la carne y al pescado.
Para enfrentar estos retos, las industrias están promoviendo campañas de información dirigidas a la ciudadanía. Esperan que con el apoyo de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) puedan intensificar estos esfuerzos. Además, han señalado a las últimas acciones judiciales favorables en base a los resultados de muestreos de productos veganos en supermercados. Este sería el caso de productos como los «Filetes MerlVza» de la marca Heura, que estuvieron bajo procedimiento contencioso-administrativo, por ejemplo.
Postulan que los productos veganos también contravienen una directiva de la Unión Europea que busca erradicar la actitud de eco-postureo. Esta se trata de una pose medioambientalista que no va acompañada de acciones consistentes. Sostienen que los alimentos vegetales utilizan mensajes como «Una hamburguesa de carne contamina más que tu coche» o «ayuda a salvar los océanos», que son de naturaleza genérica y podrían confundir a los consumidores.
Han alegado la problemática de productos vegetales que imitan el conservado del atún, pero su conservación requiere refrigeración, lo que podría representar un peligro. Adicionalmente, han solicitado a España que detenga el avance del concepto de dieta «plant-based» y retome los patrones de la dieta mediterránea, los cuales tienen respaldo científico. Según ellos, estas dietas carecen de los beneficios de los productos de origen animal, que ofrecen nutrientes esenciales y una alta cantidad de proteínas, como es el caso de los pescados azules ricos en ácidos grasos Omega 3 y las carnes con vitamina B12.