La revolución tecnológica continúa traspasando fronteras en los entornos más insospechados. Es el caso de la ganadería extensiva de montaña en la península ibérica donde un pionero proyecto emplea drones y localizadores GPS para el estudio y gestión de los pastizales. Este innovador proyecto, que abarca a unos 400 rebaños de cabras, ovejas, vacas y caballos, resulta del trabajo del área de Ecología del Centro de Investigación e Innovación Agroalimentario y Agroambiental (CIAGRO) de la Universidad Miguel Hernández.
La investigación se centra en aprendizajes profundos de los patrones de desplazamiento animales y su interacción con el territorio. Se presta especial atención a factores atmosféricos extremos como sequías intensas y cómo esto puede influir en la actividad de pastoreo en el marco del cambio climático. El uso de tecnología GPS y drones ha permitido captar imágenes y recabar datos valiosos en tiempo real.
Según los investigadores principales del estudio, José Antonio Sánchez-Zapata y Jomar Magalhaes Barbosa, los datos obtenidos hasta ahora indican que los rebaños domésticos de ganadería trashumante mantienen un equilibrio natural en los pastos de montaña. Un dato significativo ya que la ausencia de estos animales daría lugar a un crecimiento abrupto de los matorrales, situación que especies silvestres como la cabra montesa, el arruí, el muflón o el gamo, de menor densidad de población, no podrán revertir.
El proyecto no solo busca obtener una mejor comprensión del ecosistema y luego garantizar un uso más sostenible de los paisajes socioecológicos, sino también brindar soluciones beneficiosas de apoyo a las comunidades rurales. El proyecto ofrece a los pastores información en tiempo real sobre la ubicación de sus rebaños y la habilidad de crear «vallas virtuales». Al superarse estas ‘barreras’ virtuales, se activan notificaciones en sus dispositivos móviles que les alerta del comportamiento de los animales. Este avance en la confluencia de ecología y tecnología busca brindar una mejor calidad de vida para los pastores y, en consecuencia, prevenir el abandono rural.