La percepción en torno al papel de la Inteligencia Artificial (IA) en el proceso de compra está experimentando cambios significativos, según indican los datos del último estudio realizado por Aecoc Shopperview. El estudio revela que alrededor del 75% de los consumidores cree que la IA puede mejorar sus procesos de compra.
Dicha percepción se ve respaldada por la evidencia de que la IA facilitará comparar productos entre varias plataformas, al menos así lo cree casi la mitad de los encuestados. Además, el 49% confía que la IA permitirá la actualización de la información de los pedidos a domicilio, mejorando la experiencia del consumidor.
En cuanto a la hiperpersonalización de productos y recomendaciones, el 44% de la población opina que la IA será determinante en su mejora. Por su parte, el 35% de los encuestados piensa que la IA facilitará una atención al cliente más eficaz y el 29% cree que aportará seguridad en los métodos de pago.
A pesar de estos pronósticos favorables, la evolución de la IA también ha despertado ciertos temores. El 39% de la población expresa inquietud ante el avance de esta tecnología, cifra que se eleva al 43% en el caso de las mujeres. Entre las principales preocupaciones destacan la propagación de «fake news» y la amenaza a la privacidad. Un 65% teme la proliferación de noticias falsas y perfiles ficticios que puedan desembocar en fraudes, mientras que el 56% ve una posible amenaza para su privacidad.
En la esfera empresarial, la IA es vista como una revolución en el gran consumo. Según otro informe de Aecoc, el 51% de las empresas cree en el potencial revolucionario de la IA y el 43% ya está trabajando para adaptarse y beneficiarse de esta tecnología.
Estos datos evidencian una marcada tendencia hacia el uso de la IA tanto en el consumo como en la empresa, lo que pone de manifiesto la relevancia de esta tecnología en la transformación de las experiencias de compra y en la optimización de procesos empresariales.