En el norteño estado de Baja California Sur de México, las organizaciones ambientalistas de La Paz están promoviendo la educación, particularmente de los jóvenes, con el fin de combatir la sobrepesca, la contaminación y el creciente turismo que amenaza el entorno marítimo.
La Organización de Pescadores Rescatando la Ensenada (OPRE) y la iniciativa Efecto Arena son dos enfoques fundamentales en este propósito. OPRE, bajo la dirección de Hubert Méndez, se centra en la recaudación de la pesca y la restauración del agua, mientras que Efecto Arena, dirigido por Carlos Cáceres, pone gran énfasis en la educación ambiental para una conservación sostenible.
Méndez y su equipo de OPRE han trabajado arduamente para «cambiar la historia» de la bahía de La Paz y del callo de hacha, un molusco de dimensiones medianas originario de México. A pesar de ser considerada previamente como un saqueo de basura, su conscienciosa labor de limpieza eliminó más de 30 toneladas de residuos, restaurando la belleza natural de la zona.
Un aspecto notable de su trabajo ha sido la protección del callo de hacha, un marisco vital para la economía local, que había sufrido de sobrepesca. OPRE ha superado dificultades y resistencias para garantizar su cuidado y preservación.
Por otra parte, la iniciativa Efecto Arena se enfrenta a la degradación ambiental originada por el turismo irresponsable. Cáceres sostiene que «no tenemos capacidad de detener el deterioro si la gente no está educada». De este modo, su organización se esfuerza por crear conciencia en diferentes generaciones, siendo las infancias su principal objetivo debido a su potencial futuro para marcar la diferencia.
En resumen, con la persistente dedicación de OPRE por preservar su hábitat marino y con el compromiso de Efecto Arena por educar a la población, estos esfuerzos conjuntos representan un rayo de esperanza por un futuro más sostenible y respetuoso con el medio ambiente en La Paz.
