En un impulso audaz hacia la exploración espacial, Michelin ha asumido el desafío de diseñar una rueda lunar que marcará un hito en la historia de los viajes fuera de nuestro planeta. Junto a Intuitive Machines, seleccionada por la NASA, este gigante de la neumática se embarca en la misión de equipar el Vehículo Lunar Terrestre (LTV) destinado a explorar el Polo Sur de la Luna. Este vehículo, parte esencial del proyecto Artemis, debe sortear desafíos sin precedentes; desde resistir temperaturas extremas y radiación espacial hasta garantizar una tracción superior en un terreno desconocido.
Michelin, conocido por sus innovaciones en el sector de la automoción, amplía ahora sus horizontes al universo. La experiencia acumulada en el desarrollo de tecnologías de vanguardia para neumáticos terrestres se considera fundamental para conquistar los desafíos que presenta el suelo lunar. En colaboración con socios estratégicos como AVL, Boeing y Northrop Grumman, Michelin se centra en crear una rueda apta para el LTV, capaz de soportar condiciones extremas de más de 100 °C y menos de -240 °C, además de la radiación solar y galáctica.
Un aspecto revolucionario de esta empresa es la incorporación de la impresión 3D y el biomimetismo en el diseño del neumático. Esta aproximación no solo permite replicar eficazmente estructuras naturales resistentes, sino que también posibilita una adaptación dinámica al agreste terreno lunar, asegurando una movilidad óptima para el LTV. La sinergia entre Michelin y sus colaboradores promete revolucionar la movilidad lunar, abriendo nuevas vías para la exploración espacial.
El prototipo de neumático lunar de Michelin ya ha demostrado su capacidad en simulaciones terrestres, proyectando un futuro prometedor para las misiones lunares. Además, este proyecto no solo representa un salto tecnológico hacia la conquista espacial, sino que también proyecta a Michelin como pionero en soluciones de movilidad extremas, llevando la ingeniería y la innovación a límites nunca antes explorados.
