La extensión de la rebaja del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) para los alimentos ha sido confirmada por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez. Dicha reducción, que estaba prevista hasta el 30 de junio, será discutida próximamente en el Congreso de los Diputados.
La necesidad de continuar con esta medida se justifica en base a la tendencia de crecimiento de los precios de los alimentos, como un recurso para aliviar dicho impacto en los consumidores. A pesar de representar una pérdida de ingresos sustancial, estimada por la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) en 1.072 millones de euros en lo que va de año, se considera imprescindible para proteger la economía de los hogares.
A partir del 30 de junio, el IVA se mantendrá al 0% para alimentos básicos (pan, harinas, leche, quesos, huevos, frutas, verduras, hortalizas, legumbres, tubérculos y cereales) y al 5% para pastas y aceites, una medida en vigor desde el 1 de enero del 2023.
Los precios de los alimentos siguen incrementándose, esto está respaldado por las cifras más recientes del Instituto Nacional de Estadística (INE), que señalan un incremento del 4,7% en abril. Por su parte, el precio del aceite de oliva sobresale con un alza del 68,1% comparado con el año pasado, seguido de otros productos como patatas (8,6 %), carne de ovino y caprino (8,5 %), chocolate (8,1 %), productos de confitería (7,9 %), legumbres y hortalizas congeladas (7,5 %) y el pescado fresco (6 %).
La extensión de la reducción del IVA es una de las medidas que el Gobierno español ha adoptado para contrarrestar la escalada de precios de los alimentos, un fenómeno que afecta de manera significativa a la economía de los hogares en el país.