El sector agrícola está reduciendo sus expectativas en cuanto a la producción de cítricos para la próxima temporada debido a las consecuencias de diversas plagas, como el «trips sudafricano», y a las altas temperaturas aún prevalentes. Aunque el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) ha pronosticado una disminución del 1% respecto a la campaña anterior y del 8,6% si se considera la media de las cinco últimas campañas, los agricultores temen un impacto aún mayor.
La naranja, que representa el 51% del volumen total de cítricos producidos, experimentará una mayor producción en comparación con la última campaña, con un incremento del 8,8%. Sin embargo, la cifra sigue siendo un 8,2% inferior a la media.
El limón, tras una temporada récord, verá una disminución en su producción que el MAPA estima en 953.661 toneladas, lo que supone un 20,5% menos que la última temporada. En cambio, se espera que el pomelo aumente su producción un 0,6% en comparación con la pasada campaña y un 8,3% si se considera la media de las últimas cinco campañas, con una previsión de 86.305 toneladas.
En regiones clave de producción como la Comunidad Valenciana y Murcia, los cultivos están sufriendo a causa de la escasez de agua. Pedro Gomariz, responsable de cítricos de COAG, ha declarado que la falta de frío está afectando el proceso de maduración de los cítricos, convirtiendo este año en un periodo «muy duro» respecto al clima, lo cual «condiciona la campaña».
Por otro lado, las altas temperaturas han favorecido la aparición y propagación de plagas que anteriormente no suponían un problema significativo para los cultivos. El trips sudafricano, por ejemplo, está causando estragos en las plantaciones. Aunque esta plaga mancha al fruto por fuera, sin afectar a sus propiedades organolépticas, en muchos casos imposibilita su comercialización para el segmento de frescos.
Finalmente, Ricardo Bayo, secretario general de UPA en la Comunidad Valenciana, advierte sobre la entrada de productos de terceros países. Este factor, junto a las dificultades climáticas y la aparición de plagas, plantea desafíos para el sector agrícola, que deberá afrontar una temporada marcada por la incertidumbre.