El sector de alimentación en España se encuentra en una etapa de optimismo y expansión, con un crecimiento estimado del 3,3 % entre los años 2023 y 2028. Esta previsión supera el crecimiento medio previsto para Europa (2,9 %), según ha dado a conocer la Asociación de Fabricantes y Distribuidores (Aecoc).
El crecimiento del sector de la alimentación en España se sitúa en la misma línea que países como Reino Unido y Austria, mientras que supera las tasas mostradas por Europa. Por otro lado, se prevé que cada consumidor español destinará en torno a 3.242 euros en 2028 a la compra de alimentos, cifra que supera a la de países como Suecia o Grecia y similar a países vecinos como Portugal o República Checa.
Estos datos proyectan a España a la sexta posición del mercado europeo de la alimentación, por detrás de Alemania, Reino Unido, Francia, Rusia e Italia, lo que sitúa al país en un lugar destacado. El estudio sostiene que el crecimiento en el sector de alimentación se verá impulsado principalmente por la expansión de los canales de descuento y de venta online.
El canal de descuento experimentará el mayor crecimiento en cuota de mercado, pasando del 21,2% en 2023 al 23,1% en 2028. A su vez, se espera que las ventas online crezcan a un ritmo acelerado en la mayoría de los países europeos, pasando del 3,2% en 2023 al 4% en 2028, según las previsiones del estudio de Aecoc.
Además, el informe predice que las ventas de conveniencia aumentarán a medida que los distribuidores expandan sus redes, principalmente a través de franquicias. Por otro lado, los supermercados seguirán siendo líderes en la venta de productos de alimentación en Europa, con una cuota de mercado del 28,5%.
A pesar de la notoria expansión de estos nuevos canales de venta, el estudio considera que los hipermercados enfrentarán desafíos importantes. De hecho, se espera un ligero descenso en su cuota de mercado, que pasaría del 11,7% en 2023 al 11% en 2028. La resiliencia de este canal se debe a los esfuerzos que se están realizando para actualizar sus servicios y adaptarse a las nuevas tendencias de consumo.
En el caso del canal de venta tradicional, se espera que continúe perdiendo cuota de mercado, pasando del 23,6% en 2023 al 21,2% en 2028. Los consumidores cada vez más optan por canales de compra más modernos, en sintonía con los cambios de hábitos y estilos de vida.
Así, el futuro del sector de alimentación en España muestra una clara inclinación hacia la consolidación de canales de compra más modernos y accesibles que responden a las demandas de los consumidores actuales.