En un claro indicio de las repercusiones globalizadas del mercado de productos, los precios mundiales de café se han disparado en marzo, elevándose por sexto mes consecutivo y alcanzando su mayor pico en 18 meses. Así lo indica el último informe de la Organización Mundial del Café (OIC), atribuyendo este repunte a la variedad Robusta de café.
Según la OIC, el índice de precio compuesto en marzo se ha fijado en 186,36 centavos estadounidenses (alrededor de 172,08 céntimos de euros) por libra de café producida, un incremento del 2,4% respecto a febrero. La variedad Robusta ha sido especialmente destacada, cotizando a 165,84 centavos por libra (153,14 céntimos), un robusto (nótese el juego de palabras) crecimiento del 8,2% en comparación con el mes anterior. Este nivel se ha señalado como su cotización más alta desde octubre de 1994.
Existen, claro está, variaciones entre las diferentes variedades de café. El café suave colombiano, por ejemplo, ha subido apenas un 0,4%, con un precio medio de 210,27 centavos por libra (194,17 céntimos). Los demás cafés suaves se han mantenido estables, precio medio de 208,88 centavos (192,89 céntimos).
Por otro lado, la producción de café está también en aumento. Las exportaciones mundiales de granos verdes de café en febrero sumaron 10,43 millones de sacos de 60 kilos, lo que supone un incremento del 9,5% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
En cuanto a las regiones, Brasil encabeza el tablero de exportaciones de café de Sudamérica con un incremento de ventas del 51% y un total de 3,54 millones de sacos. Sin embargo, las exportaciones de Asia y Oceanía han experimentado un descenso del 17%, principalmente debido a Vietnam, que ha sufrido un retroceso del 19,7% en las ventas de café.
A pesar de las consecuencias económicas que estas cifras pueden tener para las cafeterías locales y los consumidores de café, debemos recordar que las fluctuaciones de precios son inherentes a los mercados globales de productos. Además, la escalada en el precio del café podría brindar un impulso económico muy necesario a los productores y exportadores en los países cafeteros, a medida que el mundo se recupera de la pandemia de COVID-19.