El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, Luis Planas, sellará un acuerdo el viernes con la Unión de Uniones, adoptando un conjunto de 43 medidas para abordar la crisis en el campo. Este desarrollo marcará a la Unión de Uniones como la segunda organización agraria que respalda las propuestas del Gobierno después de un período de protestas agrícolas de dos meses.
La ceremonia de firma del acuerdo será oficializada a partir de las 13.30 (11.30 GMT). El Ministerio confirmó la noticia a través de un comunicado, lo que simbolizará el final de las manifestaciones y los cierres de caminos por parte de los agricultores. Es importante recordar que la organización UPA ya firmó este acuerdo el miércoles pasado con el ministro.
Esto es un hito especialmente significante para la Unión de Uniones ya que hasta ahora había mantenido un calendario de movilizaciones independiente a las tres organizaciones mayoritarias, -Asaja, COAG y UPA-, que han tenido interlocución directa con el Ministerio al ser miembros del Consejo Asesor Agrario.
La Unión de Uniones ha defendido especialmente la celebración de elecciones agrarias y la inclusión en esos foros de interlocución directa. Sin embargo, la COAG ha confirmado este viernes que no firmará este plan pactado con el Ministerio debido a una ‘pérdida de confianza’.
El plan enviado a todas las organizaciones agrarias incluye medidas para simplificar y flexibilizar la aplicación de las condiciones de las ayudas directas de la PAC a la gestión de la labranza, la cobertura mínima del suelo, la rotación de cultivos y el porcentaje mínimo de superficie destinado al barbecho.
Además, se buscan ofrecer incentivos para facilitar la aplicación del cuaderno digital de explotación que será voluntario; un aplazamiento de un año en la obligatoriedad de la identificación electrónica para los bovinos y en la fecha de aplicación del plan sanitario integral de las explotaciones ganaderas, entre otras cosas.
El acuerdo también prevé mantener la fiscalidad actual del gasóleo agrícola y permitir la deducción de un 35% de la factura de combustibles y carburantes de uso agrario, así como de un 15% de la de fertilizantes. También se contempla una reducción general de un 15% en el rendimiento neto para el año fiscal 2023 en el método de estimación objetiva para el IRPF.
