MADRID, 17 de octubre de 2023.
Keyridge Asset Management Limited y Setanta Asset Management Limited han disminuido sus participaciones en la española Viscofan en una semana marcada por las controversias relacionadas con su planta en Danville, Illinois, Estados Unidos. La fusión entre ambas gestoras, que se lleva a cabo desde el 1 de octubre de 2025, ha conducido a esta reducción.
Como consecuencia, Keyridge ha rebajado su participación en Viscofan al 2,58%, lo que equivale a 1.199.791 acciones valoradas en 64,3 millones de euros. Por su parte, Setanta ha eliminado totalmente su posición en la compañía, pasando del 3,95% al 0%.
Las acciones de Viscofan experimentaron un leve incremento del 0,2% en el Mercado Continuo, cotizando a 53,6 euros por título alrededor de las 10:50 horas el pasado viernes. Este cambio en el capital se produce en un contexto de tensiones tras las «acusaciones graves y sin fundamento» por parte de Hunterbrook sobre las operaciones de la firma en Estados Unidos.
Viscofan defendió su trayectoria ética y su adhesión a normas de seguridad laboral y medioambiental, descalificando el informe de Hunterbrook como un ataque con «afirmaciones inexactas». A raíz de un reportaje que señalaba irregularidades en su fábrica, las acciones de Viscofan cayeron más del 13% en bolsa, lo que ha generado preocupación entre los inversionistas.
El informe de Hunterbrook Media expone que la planta en Danville es objeto de denuncias por contaminación ambiental y prácticas laborales peligrosas. Viscofan, en respuesta, categorizó a Hunterbrook como una firma de inversores activistas y rechazó las acusaciones de manera tajante, señalando que se basan en interpretaciones erróneas y testimonios anónimos que no reflejan la realidad.
Además, Viscofan enfatiza el respeto a la legislación laboral estadounidense, asegurando que sus empleados tienen la libertad de organizarse y afiliarse a sindicatos si así lo desean.
Controversia en Danville
El reportaje de Hunterbrook destaca la complicada situación en Danville, mencionando casos de exempleados afectados por enfermedades graves asociadas a su trabajo en la planta. También se incluye la afirmación de un inspector de la Agencia de Protección Medioambiental (EPA), quien calificó a la instalación como un «vertedero de residuos peligrosos». Según la investigación, la planta ha violado la Ley de Aire Limpio en repetidas ocasiones, lo que ha generado serias preocupaciones sobre su funcionamiento.
Compromiso con la comunidad
A pesar de las acusaciones, Viscofan ha manifestado su continuidad en el empleo de 260 personas en Danville, lo que la convierte en uno de los mayores empleadores de la región. La compañía también destacó su compromiso con la seguridad, señalando que su planta cuenta con la certificación ISO 45001 y un historial que incluye solo dos accidentes leves en lo que va del año.
En los últimos cinco años, Viscofan ha invertido más de 65 millones de euros en mejorar la seguridad y el cumplimiento ambiental de su planta, garantizando que sus emisiones y gestión de residuos se mantengan dentro de los límites permitidos. La empresa reafirma su dedicación a la transparencia y su compromiso con la comunidad y el medio ambiente.